COGOTES DE POLLO
Hay tres ventanas, están abiertas y no se ven pájaros en vuelo.
El cielo está anaranjado y en la cocina se acumulan cogotes de pollo;
también en las calles.
-Creo que se acaba el mundo- me dijo la vieja media loca de al lado.
-Hay que gritar- le contesté - hasta que nuestras gargantas se sequen y duela.
Quizás ahí se pueda hacer algo.
Por ahora, tengo que limpiar mi cocina.
Afuera hay un calor de mierda y está todo podrido.
2 Comentarios:
A la/s 9:37 p. m., Anónimo dijo...
Hola Armando! gracias por pasar.
Pero mira, que cosa asquerosa los cogotes de pollo, y seguro la vieja es mas asquerosa, mas asquerosa que todo todo ese olor que los inunda.
:)
Me gusta como escribes.
Nos leemos!
A la/s 10:47 p. m., H.R.Cuenya dijo...
Sabor chilenisimo.
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