Blog de Armando (La bruma)

Viajes cerebrales y poesia (work in progress)

miércoles, agosto 27, 2008

TRASEROS COQUETOS


Bailan los traseros coquetos

y sin ningún rencor

también

se balancean las cintas inaugurales

a la par

con los pechos

de una puta cara y de buen vivir


¿Que haces aquí idiota?

hombre

esclavo

el dinero sabe a sangre cuando lo tienes en la lengua


¿No ves acaso que aquí todos nos jodemos mutuamente?

hasta que el dolor sea una gracia mínima

dada

como premio de consuelo

sábado, agosto 16, 2008

Una estúpida historia de Ciencia Ficción





Por varias generaciones los Ottowalpis tuvieron que enfrentarse durante cada ciclo de apareamiento con el transgresor 4, una especie de dios de segunda categoria que usaba una máscara de 4 caras con diferentes expresiones. Hasta que nació Rammel.
Este tipo apareció en el mundo de los vivos no precisamente en la ciudad de los Ottowalpis. De padre Koffomali y de madre mitad Ottowalpi y mitad Terrestre. Luego de la sangrienta Madre de Todas las Batallas III fué encontrado en un bosque Verde-Verde y llevado a la ciudad de los Ottowalpis. Al culplir los 15 ciclos (unos 14 años terrestres) entro de lleno a la fase reproductiva de su raza. Buscó muchas hembras ottowalpis de 2, 3 y 4 senos hasta que encontró la de su gusto.
Cuando estaba en pleno acto de apariamiento con Luanna, graciosa damisela de 2 senos (obviamente su parte terrestre fue la causante de su gusto), pelo como la miel y verdes ojos traviesos, adivinen... apareció el transgresor 4. Rammel, que por alguna ironía del destino estaba echo, predispuesto y valga la redundancia predestinado a poner término al conflicto de los Ottowalpis con el transgresor 4, rompió este falso equilibrio de una vez por todas.

-¡Que demonios estás haciendo en nuestro "muldemordir de placer", ¿quien eres tú que osas romper el proceso de nuestro acto de amor y placer?- Grito Rammel al percatarse del intruso que lo observaba mientras gozaba con Luanna - ¿ Y que diablos traes en la cabeza, te crees un Cloclown?
-Soy el transgresor 4 y vengo a ejercer mi derecho sobre ti y tu mujer-
Luanna que ya se había percatado de quien podría ser huyó a un rincón del "muldemordir de placer" y se tapó con unas toallas mirando aterrorizada a Rammel y al temible transgresor 4.
- Bueno a mi me importa un carajo si eres el transgresor 4 , 5 , 6 o el que sea. Nadie me interrumpe en nada- contestó enfurecido Rammel.

Para esta altura del relato se preguntaran de dónde saco este mocoso agrandado las patas para pararse frente a un... bueno, gran semi dios como el transgresor 4 de esa manera. Esa información esta en otro relato de los Ottowalpis y Rammel en su planeta “C.C. Clarck” que algún día conocerán. Continuamos... El transgresor 4 al ver que lo estaban retando activó sus caras para atacar a Rammel, la cara numero uno lloraba, la dos gritaba, la tres reía y la cuatro refunfuñaba. Las cuatro caras se abalanzaron sobre Rammel, Rammel rió, gritó, lloró y cuando vio que la última máscara solo refunfuñaba la golpeó con todas sus fuerzas. El transgresor 4 dio varios tumbos y cayó. Rammel tomó las manos de la exquisita Luanna, le explicó que nada en el mundo era infalible y que el famoso Transgresor4 estaba vencido.

Se sentaron a observar el cuerpo inmóvil del ex-semidios hasta que Rammel nuevamente sintió el deseo apoderarse de su cuerpo y abrazó a Luanna penetrándola con más fuerza aun que antes de su lucha, Luanna activó la unidad de semi gravedad mientras los movimientos los hacían girar en el “Muldemordir de placer”, sobre los cojines, felpas y el estático cuerpo del Trangresor 4, rió sensualmente y se entregó a los vaivenes del sexo hasta que un alarido de dicha se escapó de ella y de Rammel.
Quedaron tendidos en la semi-gravedad del cuarto hasta que Rammel quedó nuevamente observando el cuerpo del intrometido ex semi-dios, se acercó para quitarle, a esa criatura, la mascara de cuatro caras. Al sacarla, no había nada, solamente algo semejante a un garfio color naranja que se fue rápidamente al rostro de Rammel llevando a las 4 mascaras con él y pegándosele instantáneamente. Las 4 mascaras se volvieron a ubicar dejando un espacio suficientemente amplio para una quinta mascara : la cara de Rammel enfurecido.
Rammel se irguió imponente en el muldemordir de placer y grito: ¡Hoy ha nacido el Transgresor 5 y ejerzo mi derecho sobre esta hembra! Tomó un cuchillo de no sabemos donde y le cortó la cabeza a Luanna. Salió del Murdemordir de placer con cierta dificultad por la semi-gravedad dejando a Luanna muerta y su sangre aun danzando entre las sábanas. Afuera se había juntado una pequeña multitud, y cuando el Transgressor 5 salió fue recibido con cantos y aplausos. Al no entender nada nuestro héroe caído en desgracia se abalanzó sobre un par de tipos matándolos fácilmente. En respuesta hubieron mas aplausos y cantos, otros dos tipos... más aplausos y cánticos, dos más... más cánticos y aplausos. Así hasta que mató a 1000 Ottowalpis hombres y mujeres. Se detuvo y dijo:

-¿Cómo pueden ser tan idiotas tropa de insectos?
A continuación se produjo la masacre planetaria más grande de todo C.C. Clarck, solo superada por “La madre de toda las batallas III”
El Transgresor 5 luego de completar su cometido se sentó sobre una de las rocas Dios de la plaza central de Ottox . “La embarré” pensó, “¿ahora quien me va a alabar?”

–Nadie- contestó la roca Dios – ahora ni tú ni yo tenemos siervos (ya que los bebés eran llevados a la luna de Emok y volvían ya en edad de procrear, o sea adultos) y estamos condenados a ir donde los Koffomali según el manual de Dioses y Semi-Dioses de este mundo, ahí será nuestro fin. Ellos no creen en nada. ¿Oiste?... nada.
- ¿Pero no es ahí donde está el Dios del trueno Thortholaix?
- Prisionero.
- Vamos en su busca, total ¿qué perdemos?. Hay que ayudarlo.

Y así los dioses se levantaron, o mejor dicho uno levantó al otro y fueron en busca de la tercera deidad planetaria. Se dice que ahí se formó la Trinidad de Clarck. Y bueno, esa es otra historia.



FIN
 
Tweet IBSN: Internet Blog Serial Number 3103-1967-0-2 Support independent publishing: Buy this e-book on Lulu.